San Antonio María Claret, obispo, nació en Cataluña el 23 de diciembre del año 1807. Durante su juventud, fue obrero textil. Siendo ordenado sacerdote en 1835, se dedicó a la predicación popular en su tierra natal y luego fundó un Instituto misionero.
Se entregó al apostolado en Cuba como arzobispo de Santiago, donde sufrió un atentado contra su vida, y después lo llamaron para que fuera consejero de la reina de España, a quien acompañó en el destierro.
Escribió gran cantidad de folletos evangélicos con la finalidad de que fueran de fácil acceso a los jóvenes. Demostró gran amor a la Eucaristía y a la Santísima Virgen María.
Perseguido y calumniado, murió en Francia en 1870. Fundó la Congregación de Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María, conocidos como claretianos, que continúan su carisma.
Fue beatificado por Pío XI en 1934 y luego canonizado en 1950 por Pío XII.
Con información de: http://www.iglesiasanjosemaria.org.mx y http://www.sanvicentelaroqueta.es.
Gabriel Ceballos
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